La Junta de Vigilancia del río Longaví realizó primer monitoreo de calidad de aguas en la cuenca del Longaví
• Durante enero se tomaron 39 muestras para análisis de la red, los que en su mayoría son evaluados en laboratorio interno equipado mediante la postulación a distintos proyectos.
Anualmente, la Junta de Vigilancia del Río Longaví y sus Afluentes, JVRL, hace seguimiento de la condición ambiental de las aguas de riego del Longaví, con el fin de compararlas con la normativa chilena y así evaluar en qué parámetros se encuentra la cuenca.
Actualmente, el equipo de la JVRL está concluyendo el primer monitoreo para determinar la Calidad de las aguas, proceso que se hace durante cada año en esta fecha. Para ello, se lleva a terreno materiales como el conductímetro (mide resistencia eléctrica) y phímetro (medidor de PH), el que cuenta con sensor de temperatura. También frascos esterilizados para el muestreo de agua, guantes de nitrilo, cinta masking y rotuladores. Asimismo, se traslada un cooler y bolsas de gel refrigerante para almacenar y mantener las muestras a bajas temperaturas. Para registrar los datos se cuenta con una planilla que contiene cada punto de muestreo nominado con un código.
Monitoreo
Durante esta evaluación, se miden internamente parámetros físicos, químicos y bacteriológicos. Se espera entregar informes de resultados a cada Presidente de canal durante marzo para que puedan hacer revisión de cada situación, los que en su mayoría son realizados mediante el resultado del laboratorio interno de la JVRL. El que este año cuenta con un contador automático de placas Petri, siendo más precisa la información que en otras oportunidad y además, hace que la evaluación interna sea más rápida.
Para realizar este trabajo se contemplan los siguientes pasos: planificación, donde se revisan resultados de años anteriores; desarrollo logístico en insumos y materiales para tomar la muestra antes de ir a terreno; toma de muestras y análisis interno, algunos de ellos son seleccionados para ser revisados nuevamente en un laboratorio externo.
Trabajo en desarrollo con nuevos profesionales
En forma permanente hay disponibilidad de realizar prácticas profesionales en la JVRL. Este año se cuenta con quien solicitó participar en el proceso de monitoreo y de otras actividades en general dentro de la JVRL. Se trata de Gonzalo Espíndola Elgueta, egresado de Ingeniería Ambiental de la Universidad de Concepción, quien comenta que hacer la práctica en la JVRL le parece una buena oportunidad para adquirir experiencia asociada con la gestión ambiental en términos de calidad de agua y riego.
“La JVRL es la primera junta a nivel nacional en preocuparse de impulsar proyectos que aseguren la calidad de las aguas que distribuyen, por lo que relacionarme con esta organización coincide con el área ambiental de mi interés”, asegura Espíndola.
Este aspecto es importante para proteger el rendimiento de los cultivos y la salud de las personas. Al ser un área de trabajo poco explorada en este rubro, es posible sacar adelante proyectos innovadores que incentiven a las demás organizaciones y regantes.
El objetivo de este trabajo es establecer una nueva metodología de monitoreo que ayude a economizar tiempo y generar una mejor comprensión e interpretación sobre la calidad de las aguas del sistema de riego del río Longaví. Lo cual potencia la gestión ambiental en la organización, previniendo problemas ambientales asociados al agotamiento de la disponibilidad del recurso hídrico. De esta forma, será posible garantizar su seguridad a largo plazo.